Entrevista Luisma Iturria

Presentado por Honu Beach

Por Sebastián Chacón

Mar del Plata, enero caluroso. Primeros años del nuevo milenio. En un semáforo de la calle Alem, camino al sur, un vendedor de estampitas le ofrece a mi acompañante, una de San Cayetano.

-Tomá Flaco, para que nunca te falte el trabajo.

-¿Me habrá visto la cara de vago?- me preguntó un segundo antes de soltar una estruendosa carcajada que hasta el día de hoy recuerdo.

Lo cierto es que casi diez años después, Luisma Iturria sigue recordando ese momento, y en honor a la verdad, el trabajo nunca le ha faltado. Esa misma dedicación al surfing, lo volvió a depositar en Mar del Plata, esta vez no en condición de competidor, sí como el coach del equipo uruguayo de la USU para el Campeonato Sudamericano de Surf Juvenil que se disputó en Honu Beach.

La historia de Luis María Iturria se escribió a fuerza de surfing y de típico coraje Charrúa. Casi de la nada emergió en la incipiente escena del circuito ALAS, no sin antes haber pasado por olas de grueso calibre y dejar marcada su impronta en revistas como la australiana Surfing Life, después de dar la nota en Indonesia.

Minutos antes de una gran sesión en Honu, charlamos con el multicampeón uruguayo, hoy formador de talentos. Sus primeras impresiones sobre el gran evento del semillero sudamericano, son las indicadas para disparar la charla.

Fue muy lindo, muy competitivo. Vinimos con expectativas de llegar a más en comparación con el año pasado. El año pasado nos llevamos una impresión fuerte al ver cómo estaban trabajando las federaciones con sus equipos, y eso se ve reflejado en el trabajo, la dedicación de parte de los cuerpos técnicos y de los chiquilines en los resultados.

Nosotros este año logramos avanzar en main event  con varios chicos, con uno en Sub 18 llegamos hasta el día final, llegó hasta la semifinal en esa categoría. En las chicas estuvimos un poco más flojos pero estamos contentos, mejoramos con respecto a la participación del año pasado, mejoramos de todo un poco pero igualmente sabemos que estamos bastante por debajo de los países vecinos como Argentina, Chile y Perú. Nos vamos contentos, se lograron aspectos individuales, también por equipo. Marcamos cosas para seguir trabajando a futuro.”

Afortunadamente las olas acompañaron durante todo el evento. ¿Qué impresión se llevan de las olas marplatenses?

Es muy difícil marcar una fecha y garantizar olas en el Atlántico,  por suerte hubieron cuatro días de buenas olas. Desde que llegamos tuvimos buenos pronósticos, cambiantes pero siempre con buenas condiciones, siempre surfeables y el día final fue con olas mucho más grandes de lo esperado. A algunos chicos y chicas les complicó la condición, pero bueno… A veces es para abajo y a veces es para arriba, en este caso tocó para arriba con olones y está muy bueno que les toquen olas de mayor porte, porque los chiquilines tienen que saber surfear tanto olas chicas como olas grandes.

¿Cómo ves a Mar del Plata y su cultura de surf y de playa?

Vengo hace años a Mar del Plata y veo una gran ciudad, con surfing, con tremendo mercado, con un circuito de campeonatos mayor. Lo comparamos con Uruguay y vemos mucho más, mucho más gente, mercado, está buenísimo porque se puede reflejar en las competencias, en las preparaciones, en los trabajos de los diferentes coachs que hay en la vuelta. Veo que hay mucha actividad con el surfing hoy en día, en todo sentido.

A Mar del Plata la veo bien Bo, siempre venía en verano y ahora en otoño es diferente, se lo ve con muy buenas olas. Para mí, personalmente pude surfear La Maquinita, que es una ola que tanto había escuchado y visto en videos, siempre la mítica ola Maquinita… Hoy la verdad que estuve ahí en el agua y fue buenísimo.

¿Qué impresiones te llevás de Honu y de todo lo que ahí se propicia?

Es alucinante, se lo dije a Gustavo (Mondo) y le pregunté  si no tenía ganas de abrir una sucursal en Punta del Este (risas). Está muy bueno el hecho de un tener un club, gimnasio, cafetería, restaurante, guardería, escuela de surf, estructura para campeonatos, un lugar fijo donde siempre puedas tener los jueces cubiertos sea invierno o verano… Está de más. La verdad que es un club de playa muy lindo, siempre nos han tratado muy bien. Nos hemos sentido muy a gusto y eso la verdad que ayuda. Ayuda mucho tener un espacio así durante un campeonato, especialmente cuando los chiquilines salen del agua y se pueden ir a dar una ducha de agua caliente, dejar sus tablas acá. Hay sombra y un montón de cosas que te da cierta comodidad, cosas que no encontrás en lugares como Brasil o California, donde vas a competir y terminás debajo de una sombrilla, en el auto o en un pastito.

¿Cómo te imaginás el futuro del surf?

No me lo imagino mucho, no soy de planificar mucho, soy más del corto plazo, en general te lo digo. Yo creo que el surfing va a seguir aumentando su población de surfers, la industria, el surfing profesional esperemos que no cambie mucho. Está bueno ver hoy cómo están compitiendo en la Fórmula 1 del surfing, está alucinante… Esperemos que Kelly siga unos cuántos años más (risas), queremos Kelly para toda la vida.

Creo que va a seguir evolucionando, por ejemplo hace unos años veíamos muchos más aéreos y ahora creo que se está volviendo el power surfing, nuevamente las curvas, la línea, la velocidad, la transición de una maniobra a la otra. Y ya es un deporte olímpico también, vamos a ver cómo sale esta olimpíada en Tahití. Creo que sin dudas será un buen show.