Texto: Sebastián Chacón

Diego García, editor en jefe de Gravedad Zero Mag, es el encargado de responder trece preguntas antes de que el número trece llegue a los puestos de diarios y revistas. Una entrevista no apta para supersticiosos.

 Desde que Gutenberg desarrolló aquella idea seminal que devino en la invención de la imprenta, un sinfín de publicaciones han saciado la sed de escritura y ambiciones de lectura de cientos de miles de periodistas, científicos, investigadores, chantas, rufianes, políticos, oportunistas, historiadores, poetas, gurúes de la autoayuda, ventiladores de intimidades ajenas, memoriosos y especialistas en cuanto arte sea digno de una publicación escrita. Pero lo que no imaginó el bueno de Gutenberg fue que su invención daría paso a la creación de un personaje ineludible en el mundo editorial, el editor.

“Lo necesito para ayer”, suele ser una de las cinco frases de cabecera de un editor a la hora de pedir material para la publicación que dirige. No creo equivocarme en esta sencilla pero eficaz descripción del personaje en cuestión. El editor es un personaje que se las ve cara a cara todo el tiempo con la Sra. Presión, dama que suele poner contra las cuerdas en más de una oportunidad al mandamás de turno.

Diego García es uno de estos personajes que asume responsabilidades todo el tiempo en esa aventura llamada Gravedad Zero Mag, revista especializada en los deportes de tabla, craneada, pergeñada y parida en la República Argentina.

Sentado en su escritorio de editor en jefe de Gravedad Zero Mag, Diego García es uno de los grandes responsables de las trece ediciones de esta muy buena revista de la cultura del deslizamiento. Tranquilo pero firme en sus convicciones, Mr. García es quien se encarga todos los meses de recordarme, recordarme y volver a recordarme que necesitaba mi artículo para ayer, pero debo confesar que las malas juntas lo han llevado a convertirse en un entregador de notas sobre la hora, y esta entrevista es una muestra de eso.

Después de trece portadas, un par de pelos menos y varios amagos para esta entrevista, finalmente Mr. García responde estas trece preguntas que grafican varios puntos en el proceso evolutivo de Gravedad Zero Mag.

Damas y caballeros, con Uds. Diego García… O el hombre de la camisa negra.

¿De quién es originalmente la idea de la revista?

La idea de hacer GZ en papel fue de Nico Nervi, Mateo Rojas y Fernando Armada. En ese momento cuando se estaba gestando la producción de la Mag la idea era sacarla en conjunto con la gente de Planeta Urbano, donde el editor de esa revista es el primo de Mateo. Cuando estaba todo en marcha me llamó Mateo para ver si quería sumarme al proyecto, hacía un año habiamos estado filmando un surf trip, el FREELIFE ON TOUR por el norte de Uruguay, ahí conocí a Nico y fueron saliendo ideas de hacer una revista. Ellos conocían el trabajo que hacía en Rad!, donde trabaje con Tomás Crowder, quien me enseño mucho de todo esto de hacer revistas.

En realidad lo que busca transmitir la primera tapa es el estilo de revista que queríamos empezar a hacer. Buscábamos una foto que nos remita calidez, seriedad, una mirada más interesante y no una foto común como podes ver en otras tapas de revistas de todo el mundo. Con Mateo teníamos en la cabeza la idea de generar una edición que se asemeje a The Surfer Journal en el estilo de imagen y presentación. Cuando vi la foto de Emiliano Gatica y que encima era de Martín, ¡Bingo!, teníamos la tapa. Un argentino para la primera edición, y encima Martín, con todo lo que representa, estábamos listos para ir a imprenta.

Definitivamente sufrimos un gran parate de la publicación de la revista #5 a la #6. Fueron más de cuatro meses que rompieron la idea de hacer la revista bimestral. La crisis nos afectó en clientes que no tienen relación con la industria, por eso destaco el apoyo por parte de las empresas vinculadas al sector, que a pesar del mal momento siguieron apostando en la revista. También el apoyo de Nico y de la productora a seguir apostando a la revista fue muy importante en ese momento.

Igualmente los problemas más grandes en ese momento los teníamos internamente, con personal administrativo de la productora que no tomó las decisiones correctas y la revista sufrió mucho, este daño fue mayor que el de la crisis. Por suerte hay un nuevo grupo de trabajo en este sector que empuja para adelante en el proyecto.

Mi edición favorita hasta ahora es la #11, una revista que gira en torno a un concepto, el contenido fue muy bueno, con viajes a destinos increíbles: Indo, Australia, Aspen, Nueva Zelanda. Sobre todo  fue la revista que empieza la idea de una tapa doble, abriendo el mercado para el surf y el skate al mismo tiempo. GZ Mag es una revista que tiene la base en tres deportes, Surf – Skate – Snowboard. Con la producción de una tapa doble podemos, en función a las temporadas, cubrir a dos de nuestras principales bases de contenido. Desde mi lugar fue muy bueno hacer ese número, me quemó la cabeza y perdí unos cuantos pelos, pero el resultado está impreso y queda para siempre.

Para la revista cuento con el aporte de cuatro personas que están en el día a día de la Mag, sumado a toda la gente que trabaja en la productora de Mundo Zero. Leo Mezzera es el redactor y productor, es mi mano derecha y fuerza motriz de la revista; Sabrina Palacios es nuestra comercial y maneja el marketing, se ocupa de conseguir el vil metal para que podamos hacer la revista. Verónica Coletta del estudio de diseño Blühen es la directora de arte, ella es la que propone la estética de la revista y baja mis ideas de cómo enfocar una nota al papel. Mateo Rojas que se ocupa de la producción editorial, genera contenido y está siempre online desde cualquier parte del mundo aportando ideas y devoluciones de cómo ve el contenido para la Mag. De la productora Mundo Zero tenemos a Javi en la distribución y Cinthia en la parte de comunicaciones, Mavi en administración y contamos con el apoyo de Bárbara Französy de la parte de GZ TV para la producción y generación de contenidos. Después está Nico Nervi y Fernando Armada como directores de la productora.

¿Cuál fue la entrevista más difícil que te tocó hacer y por qué?

Para mí no hay entrevistas fáciles o difíciles, el tema pasa por la gente con la que trabajás para hacer las notas. Es la relación con los fotógrafos y redactores lo que determina las situaciones de cómo llegar a lograr una buena nota, siempre es un trabajo en equipo, de eso se trata. Creo que el entrevistado siempre está bien predispuesto y con ganas de que todo salga bien. En un principio me costó tener un buen equipo de trabajo con el que te sientas cómodo, hoy estoy realmente conforme con las personas que tenemos para hacer la revista y con el grupo de fotógrafos que venimos trabajando. Hay secciones fijas que las hacen amigos como Surfology por Juan Cruz Lanzinetti o Sonidos por Adrian Mazzeo, todo esto gira en un entorno de personas a las que confío me van a entregar un material siempre interesante.

¿En qué momento de la edición te agarran ganas de mandar todo a la mierda?

La realidad es que me gusta mucho hacer la revista, no le encuentro nada malo al proceso de hacerla. Estudie Diseño Gráfico y me especialicé en Diseño Editorial porque desde un principio sabía que quería hacer una revista vinculada a estos estilos de vida. Tengo una devoción por las revistas desde el colegio secundario, comprando de forma compulsiva todas las publicaciones que tengan que ver con esto. De hecho cuando empecé a trabajar para Rad! tenía todos los números publicados hasta el momento, ni hablar de Surfer y Surfing.

No te voy a negar que hay momentos difíciles y aburridos pero siempre están vinculados a la parte administrativa y no al trabajo en sí como editor de la revista y a su proceso creativo.

¿De todos los colaboradores quién es el que siempre está entregando el material sobre la hora?

Bueno, esta pregunta lo pone en una situación difícil amigo mío. La realidad es que ese lugar de llegar sobre el filo lo tiene asegurado usted desde hace varias ediciones. Hay varios a los que voy corriendo con un palo para agarrarlos y sacarles el material, pero nunca ningún problema que no tenga solución, por suerte es tanto el contenido que hay dando vueltas por el mundo que si no se llega con una cosa se pone otra y saldrá más adelante.

¿Quién se merece la próxima portada de GZ MAG?

Maxi Siri sin dudas, por la relación de amistad que tengo con él y porque hace bastante que venimos buscando “la foto”. Está en un increíble momento de su carrera y por lo que ya ha logrado es quien me parece debe tener una tapa de GZ Mag. Tuvimos varias opciones con fotos de Agustín Muñoz y Maxi Bendahan, pero siempre aparecía alguna que cerraba más. Será también que tengo en la cabeza una imagen única y un rango de calidad muy alto para esa foto, pero sé que va a llegar y va a quedar increíble.

Otro rider que me parecía tenía que estar es Diego Bucchieri, por suerte y con una muy buena foto es la nueva tapa de Skate de la revista #13 próxima a salir.

¿Cómo se hace para vivir en la ciudad de la furia y estar ideando siempre material que transcurre en el mar o la montaña?

Es muy difícil vivir en Buenos Aires, realmente me lo cuestiono todos los días, pero creo que al estar conectado todo el tiempo con estos estilos de vida es lo que me mantiene en una sensación de ser parte de cada foto o texto que pongo en la Mag, con mi marca de accesorios de surf tengo dividido el tiempo entre la revista y todos los productos que fabricamos los cuales son 100% utilizados para surfear. O sea que mis días transcurren abocados a estos estilos de vida al 100%, en constante comunicación con la gente que los practica y las personas de la industria. Dos de mis mejores amigos también tienen marcas relacionadas a estos estilos de vida y comparto con ellos también las escapadas al mar o donde sea que vayamos con una tabla. Estoy seguro que esto hace el equilibrio para que pueda seguir estando en Buenos Aires.

¿Qué cosas te quitó el hecho de ser editor de la revista?

Tiempo con la familia, sobre todo con mis dos hijas, algo que no puedo dejar pasar más, es un tiempo que no va a volver así que hay que tener muy claro los límites. Descuidar mi marca de accesorios; pero en el balance cada vez las cosas están mejor ordenadas y todas siguen creciendo. Creo que estar haciendo la revista me da mucho más de lo que me quita, es cuestión de estar bien organizados.

Siempre mi idea de cómo producir la revista gira en torno al concepto de tomarla como un objeto, ese es la meta. La revista está pensada para que funcione como un objeto que lo puedas observar, buscar sus detalles, diferentes formatos, páginas que salen, perforaciones, que incluyan un DVD, un insert, la revista tiene ese olor especial del papel impreso, el concepto de objeto es buscar más allá de buenas fotos y textos, es transmitir una sensación a partir de todos los sentidos en el lector. Es lo que me pasa a mí cuando me llega una revista; sentarme a desayunar y ver cada detalle de la publicación, son momentos y sensaciones que el formato digital todavía no me puede generar. Lograr una especie de sentimiento de colección en los lectores.

Igualmente no dejo de lado todas las increíbles cosas que veo en internet y la velocidad de transmisión de la información. Creo que siguen siendo dos productos diferentes pero complementarios, cuanta más información tengamos al alcance, mejor para que cada uno pueda elegir que obtener.

Enumerame 3 bondades de ser editor de una revista y 3 excusas para dejar el puesto vacante.

1- Conocer y estar en contacto con gente de los deportes que practico y que forman parte de mi vida.
2- Ver fotos increíbles todo el tiempo de lugares a los que quiero ir.
3- Algunos descuentos, algunos regalos.

1-Mucha presión, responsabilidad.
2-Cuando te llaman a las 3 am para ir a la imprenta.
3-Mucho stress, del que te deja sin pelos en la cabeza.