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LA BIBLIA NO TENDRÁ NUEVOS CAPÍTULOS

Adiós a Surfer Magazine

Por Sebastián Chacón

La biblia no tendrá nuevos capítulos, el pasado viernes se terminó una historia tan antigua como fundamental en la era del surf. La Surfer Magazine cerró para siempre en su formato original, ese que se imprimía en papel y formaba parte de tesoros personales de distintas generaciones.

La era digital, las redes sociales y la crisis económica originada por la pandemia, fueron los últimos golpes mortales para la creación de John Severson que debutó en 1960 con José Angel en su portada. Los cambios en la asignación de presupuestos también hicieron lo suyo, lo digital se lleva gran parte de la torta y ahora las empresas, quizás entre una revista que apuesta a la búsqueda de historias y un influencer, optan por el segundo.

La historia de Surfer Magazine es sólo comparable con Rolling Stone, ambas publicaciones retrataron como nadie el crecimiento de estos movimientos contraculturales. Incluso Surfer fue antecesora a Rolling Stone (1967), incluso fue anterior a las mismísimas Majestades Satánicas.

Los cambios de era fueron captadas con filosa agudeza, tanto en materia de surf, con el nacimiento del surf competitivo, la evolución de las tablas y los estilos que fueron marcando cada época. Diseño y fotografía, terminaron de redondear un objeto de culto que hoy es parte de un ayer con olor a tinta fresca.

La caída de la Surfing Magazine hace unos años, fue un aviso. Su hermana mayor siguió en el circo, el cambio de época y el advenimiento de una generación amante de la chatarra digital, llevaron a la Surfer a ocupar el lugar de partenaire del lanzador de cuchillos. El pasado viernes, el pulso del lanzador tembló más de lo habitual, y la función del gran circo de las mega corporaciones terminó con la muerte de la revista más icónica del surf.

Surfer Magazine 1960 – 2020

Te vamos a extrañar.

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